TORRE DE HERCULES (A CORUÑA)
• Localización: 43º23´N 8º24´W.
• Altura: 49 metros.
• Altura sobre el nivel del mar: 106 metros.
• Escalones: 234.
• Alcance: 24 millas.
• Destellos: grupo de 4 cada 20 segundos.
Historia
La Torre de Hércules fue construida por los romanos como faro de navegación
en el siglo I d. C., comprendida la construcción entre los reinados
de Nerón y Vespasiano en función de los hallazgos de fragmentos
de terra sigillata y vasos de paredes finas datables entre los años
40 y 80 de nuestra era[cita requerida]. La inscripción al pie de la
torre y las referencias documentales sobre la ciudad de Brigantium (La Coruña)
revelan la existencia de un faro de la época de Trajano. En su base
se encontró una piedra votiva con la inscripción en latín
MARTI AUG.SACR C.SEVIVS LUPUS ARCHTECTUS AEMINIENSIS LVSITANVS.EX.VO, lo que
ha permitido identificar al arquitecto autor de la misma como Cayo Sevio Lupo,
originario de Aeminium, hoy Coímbra, en Portugal.
La mención más antigua a la Torre se encuentra en el Historiae
adversum Paganos de Paulo Orosio, escrito hacia el 415–417 d. C., que
dice: «Secundus angulus circium intendit, ubi Brigantia Gallaeciae civitas
sita altissimum farum et inter pauca memorandi operis ad speculam Britanniae
erigit».
Asimismo, historiadores identificaron la torre como el lugar donde pudo haber
estado situada la Torre de Breogán, una torre mitológica que
aparece entre otros en el ciclo mitológico irlandés (más
concretamente en el Leabhar Ghabhála Érenn), y desde la que
Ith, hijo de Breogán, habría avistado las costas de Irlanda.
Esta sospecha viene acrecentada por el topónimo Brigantium, que es
altamente posible que derive de Breogán, y tiene sustento en la tradición
de los romanos a la hora de identificar a sus propios dioses o héroes,
en este caso Hércules, con los autóctonos.
La torre perdió, posiblemente, su uso marítimo durante la Edad
Media al convertirse en fortificación. Será en el siglo XVII
(1682) cuando el Duque de Uceda encargue la restauración arquitectónica
al arquitecto Amaro Antune, que construyó una escalera de madera que
atravesaba las bóvedas hasta la parte superior, donde se sitúan
dos pequeñas torres para soportar los fanales. En el reinado de Carlos
IV de España se realizó la reconstrucción completa. La
obra neoclásica se terminó en 1791 bajo la dirección
de Eustaquio Giannini.
La torre era, antes de comenzar la reforma, un cuerpo prismático con
base cuadrada; en el exterior presentaba un muro de piedra con dos puertas
en la parte baja y ventanas asimétricas que la recorrían hasta
el piso superior, y una mordiente helicoidal que llegaba hasta la parte superior.
En su interior conservaba la vieja estructura romana, pero con escaleras de
madera que pertenecían a la restauración de edificio, armonizándola
en su decoración con marcos superiores de puertas y ventanas.
La mitología dice que «hubo un gigante llamado Gerión,
rey de Brigantium, que obligaba a sus súbditos a entregarle la mitad
de sus bienes, incluyendo sus hijos. Un día los súbditos decidieron
pedir ayuda a Hércules, que retó a Gerión en una gran
pelea. Hércules derrotó a Gerión, lo enterró y
levantó un túmulo que coronó con una gran antorcha. Cerca
de este túmulo fundó una ciudad y, como la primera persona que
llegó fue una mujer llamada Coruña, Hércules puso a la
ciudad este nombre»[cita requerida].
La fachada actual de la torre es el fruto de la remodelación neoclásica
efectuada en el siglo XVIII. En el año 2007, su candidatura fue elegida
para engrosar la lista de bienes culturales aspirantes al Patrimonio de la
Humanidad; el 9 de septiembre de 2008 se hermanó con la Estatua de
la Libertad de Nueva York y el día 25 de ese mismo mes con el Faro
del Morro de La Habana, el más antiguo de América y uno de los
emblemas de Cuba.
Nota: Datos extraídos de Wikipedia.
En el encuentro del año 2008 se realizó
una obra conjunta del grupo, dedicada a la Torre de Hércules. A día
de hoy la mencionada obra se encuentra expuesta en un marco incomparable a
los pies de la propia Torre, en el ACUARIUM FINISTERRAE popularmente llamado
"la casa de los peces".
Como despedida del encuentro, los organizadores tuvieron la estupenda idea
de llevarnos a ver la mencionada obra y, de ello dejamos constancia en la
siguientes imágenes.